Primera noche de junio,
con débil luz de Luna creciente.
Alguna nube perdida bracea despacio entre la negrura cálida.
El camión de siempre hizo añicos el silencio
-y los plácidos sueños-
con estruendo insoportable.
Pulsación acelerada,
cabalgando las arterias desoladas.
Y duele.
Duele el pecho herido, cansado, alerta.
Como los espejismos de una mente desierta, ahogada por la arenosa agonía.
Nieves Merino Guerra.
Gran Canaria.
España.
Junio 2020
Comentários
Nieves, que felicidade ler um texto teu. Tao bom ve-la de volta.
Um abraco.
Amadisima Marta, qué alegría ve-la también.
Sim.
Tento de a poucos, mas ainda custa muito.
Saudades de vocês até morrer.
Muitíssimo obrigada, minha linda.
Beijossssss
Belíssimo, Nieves!!!
Meus parabéns.
Bjs
Muchísimas gracias, Márcia querida.
Adoro você.
Besos
Muy hermosa ... me encantó la poesía de sus versos
Gracias hermana Nieves
Muitíssimo Obrigada, prezado Antonio, grande poeta, pela sua gentileza.
Abrazos
Obrigada, meu carinho!
Custou muito, mas desejava demais.
rsrs...
Perdí uma referida a minha mãe.
Mas tentarei outro dia.
Te querooooo.
Onde está você?💞