.
Soy yo... Tu piano
.
Gracias a ti, amada mía
por tus caricias amoldadas
a cada poro en mi teclado.
.
Por tu fuerza y tu dulzura
y el aroma de tus manos.
.
Me das vida.
Me despiertas
con tu sentimiento humano.
.
Arrebatos pasionales,
alegrías y fracasos.
.
Con tus lágrimas serenas
abrillantas mi marfil.
.
Con tus risas y tus penas
la madera que hay en mi
se ennoblece con el tiempo
atemperando al silencio.
.
Tiernas nanas, furias locas...
.
Soy el eco de tu alma
cuando tu cuerpo me toca.
.
Cada cuerda que se esconde
atrincherada en mi caja
se desborda con tus dedos
bailando sobre su arpa.
.
Y te extraño. Me adormezco
hibernando entristecido
esperando tu regreso
como un Lázaro en su nicho.
.
Los acordes que me inflamas
son como aliento divino.
Y renazco, me reclamas
sinfonías, melodías
en mi conjunto de nácar.
.
Mucho más que siete notas...
Mucho más que la armonía
que se mece día a día
del adagio al alegreto.
.
Es la magia de tus besos
entre tu alma y la mía.
.
Cuanto más viejo
más siento
que sin ti no existiría.
.
Elen mía, hermosa amada,,
diosa Isis reencarnada
Musa de todas mis musas...
¡Yo sin ti no sería nada!
.
Tu piano.
...
Elen querida :
.
Me lo dijo tu Piano al oído
-emocionado, sensible-
Convencida y convencido
de que eres insustituible.
.
Besos
Con todo mi amor y admiración
.
Nieves María Merino Guerra
Gran Canaria- España
06-02-2015
Comentários
Maarvilha de composição, Nieves. Belíssimo!
E sempre um prazer reler-te, mosqueteira. Belíssimo! Bjs
Naveguei por aqui, amei, muita entensidade e beleza.
Gracias, Sam.
Obrigada.
Me honras com tua presencia.
Beijos